Al final de las intervenciones, George Hadib, refugiado sirio, repasó su trayectoria y destacó las contradicciones entre las facilidades que se ofrecen al refugiado y la eficacia con que se llevan a cabo.
El portavoz de la Asociación del Amigos del Pueblo Saharaui de Segovia, Yeyo Quintanilla, resaltó la obligación que tienen las sociedades, los gobiernos, no solo de atender las necesidades de los refugiados sino también la ineludible responsabilidad de contribuir a concluir con las causas que los provocan y que, precisamente, emanan de la actividad de esos mismos gobiernos.
Pasó Quintanilla a continuación a relatar una breve historia del conflicto saharaui, que efectivamente no solo ha provocado que un buen número de personas tengan que refugiarse en los campamento argelinos, desde hace 42 años, sino que la gran mayoría de saharauis hayan estado y estén soportando la continua violación de los derechos humanos por parte de Marruecos, potencia extranjera que ocupa militarmente su territorio.
Todo esto sucede, comentó el ponente, ante la pasividad de Naciones Unidas y la irresponsabilidad de todos los gobiernos españoles, desde el último de la dictadura, que no han querido afrontar su deber de concluir la descolonización del Sáhara Occidental y que, muy al contrario, apoyan al gobierno marroquí en sus pretensiones anexionistas.
Resaltó la pasividad de la ONU, (con el beneplácito de las grandes potencias: EEUU, Francia Gran Bretaña...) que incumple su propia legalidad internacional no obligando a convocar el referéndum de autodeterminación que sus propias resoluciones proponen.
Concluyó el portavoz de la asociación pro saharaui, afirmando que el problema de los refugiados en general y de los derivados del conflicto saharaui, en particular, no es solo un problema de atención humanitaria sino que es un problema de voluntad política y que esta se consigue en las urnas o se impone con la movilización social.
Hubo un interesante coloquio por parte del público del que habría que destacar la intervención de una mujer saharaui, residente en el municipio, que insistió en la idea de que al pueblo saharaui reclama su oportunidad de decidir en un referéndum pues para todo lo demás tienen capacidad suficiente para solventarlo».